La preocupación por los sobrecostes y el posible impacto sobre la producción está llevando al límite a muchas explotaciones. Los datos hablan por sí solos, por ejemplo el precio del gasóleo agrícola se ha incrementado un 120% respecto a junio de 2021, la energía eléctrica un 180% y los piensos para la alimentación del ganado un 36% para el vacuno y un 49% para el porcino. Con este contexto, las medidas puestas en marcha por el Gobierno resultan insuficientes, por ello, ARAG-ASAJA insiste en la necesidad de establecer medidas fiscales urgentes que alivien los incrementos de costes de producción en el sector.
¿Cuáles son estas medidas?
- Reducir el IVA de los hidrocarburos
- Reducción en la factura del gasóleo del 35% y del 15% de los fertilizantes y plásticos en el IRPF
- Aplicación del tipo superreducido del 4% del IVA
- Reducción de los costes energéticos aplicando la doble tarifa del riego
- Incremento de la deducción de los gastos de difícil justificación
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